Señor Pérez, salga usted a la pizarra y escriba: “Los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa”.
El alumno escribe lo que se le dicta.
- Vaya usted poniendo eso en lenguaje poético.
El alumno, después de meditar, escribe: “Lo que pasa en la calle”.
- No está mal… Cada día, señores, la literatura es más escrita y menos hablada. La consecuencia es que cada día se escribe peor, en una prosa fría, sin gracia.
Antonio Machado. Juan de Mairena. 1936.
martes, 27 de septiembre de 2011
domingo, 25 de septiembre de 2011
domingo, 11 de septiembre de 2011
sábado, 10 de septiembre de 2011
REFLEXIONES. PERDÓN CON NORTE.
EN LA SED MORTAL
Perdón por los cuatro elementos
por la tierra y el agua
y el fuego y la polución...
Perdón por los cuatro elementos
por la tierra y el agua
y el fuego y la polución...
viernes, 2 de septiembre de 2011
TODO ARDE SI LE APLICAS LA CHISPA ADECUADA
Las palabras fueron avispas
y las calles como dunas
cuando aún te espero llegar
de un momento a otro.
En un ataúd guardo
tu tacto y una corona
y el pelo enmarañado
queriendo encontrar
un arco iris infinito.
No sé distinguir
entre besos y raíces,
no sé distinguir
lo complicado de lo simple.
Mis manos que aún son de hueso
y tu vientre sabe a pan,
la catedral que es tu cuerpo...
Eras verano y mil tormentas,
y yo el león, que sonríe a las paredes
que he vuelto a pintar
del mismo color.
No sé distinguir
entre besos y raíces,
no sé distinguir
lo complicado de lo simple;
y ahora estás en mi lista
de promesas a olvidar.
Todo arde si le aplicas
la chispa adecuada.
El fuego queda a veces propio
la ceniza siempre ajena.
Blanca esperma resbalando
por la espina dorsal.
Ya somos más viejos y sinceros,
y qué más da
si miramos la "laguna"
como llaman a la eternidad
de la ausencia.
y las calles como dunas
cuando aún te espero llegar
de un momento a otro.
En un ataúd guardo
tu tacto y una corona
y el pelo enmarañado
queriendo encontrar
un arco iris infinito.
No sé distinguir
entre besos y raíces,
no sé distinguir
lo complicado de lo simple.
Mis manos que aún son de hueso
y tu vientre sabe a pan,
la catedral que es tu cuerpo...
Eras verano y mil tormentas,
y yo el león, que sonríe a las paredes
que he vuelto a pintar
del mismo color.
No sé distinguir
entre besos y raíces,
no sé distinguir
lo complicado de lo simple;
y ahora estás en mi lista
de promesas a olvidar.
Todo arde si le aplicas
la chispa adecuada.
El fuego queda a veces propio
la ceniza siempre ajena.
Blanca esperma resbalando
por la espina dorsal.
Ya somos más viejos y sinceros,
y qué más da
si miramos la "laguna"
como llaman a la eternidad
de la ausencia.
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