También será un verano para cortinas, ha llovido mucho, todo está exuberante, incluidos, por supuesto, los animales más exitosos del mundo, los insectos. Será barrera, sobre todo para las moscas, que son muy cansinas.
La cortina está hecha, principalmente, de junco, aunque la base para sostenerla, y los adornos del principio y del final son de esparto. Los remates son minirrodetes de esparto picado tintado al vino de Jumilla.
Todo queda en el terruño.
¿Os gusta el asiento que usé para rematarla?
Aquí ya en su sitio. |