2° intento para hacer papel de esparto sin sosa.
Parece que va mejorando.
He cocido muchas horas el esparto, en varias ocasiones, no sabría decir cuántas...unas 12.
El esparto me lo trajo un amigo muy picadito, supongo que ayude a que la fibra se suelte, pero... ¡es tan duro, tan tenaz el esparto!
Comienzo a montar una cortina que está forjándose dos años a ratines, y lo que le queda...
Pero creo que el resultado habrá merecido la pena, pues el proceso la está mereciendo.
Tejer es meditar y conectar.
La Tierra, Gaia, la Pachamama... no entiende por qué vivimos como vivimos y hacemos lo que hacemos...
Somos bastante cretinos...
El pasto siempre más verde del otro lado. ¿Es eso?
La guerra y la avaricia lo arruinan todo y a todos.
¿No aprendemos?
No lo entiende ni nuestra casa, ni yo.
Hagamos moda con lo que hay cerca. Se puede y se debe. No provoca dependencias, no contamina, no arruina nuestro hogar, no nos arruina a nosotros, ni a los que vendrán.
Cortina para mi prima Esther, hecha con junco, papiro, esparto, lana, caña y muchísimo cariño.
