Medicina, de la buena.
Esta semana fue dura en el trabajo, que me coincidió con dos cursos, uno muy bonito, pero otro terrible... estrés, mucho estrés innecesario.
Este finde he cogido el esparto, necesitaba una cura.
Generoso, me la ha regalado.
Esparto tintado, regalo de Agustín, y esparto dorado recogido por Amador hace 50 años.